jueves, 24 de diciembre de 2015

La Navidad del Paraguay

DOS TROCITOS DE MADERA

 Dos trocitos de madera ya techaron el establo,
en el cielo hay una estrella que guía a los Reyes Magos;
el Niño, José y María, moldeados en el barro,
dan la imagen navideña, itã jegua color rosado.

De regalo sandía y chipa, naranjitas y pakova,
peguerúke lo mitâ Ñandejara’ipe guarâ.

Con chipa se hizo la cena y un pedazo de mbeju,
estamos en Nochebuena, la noche del mborayhu;
que lindo está el pesebre, mirána un poco el yvu,
y en sus orillas cantando su tristeza un kururu.


De regalo sandía y chipa, naranjitas y pakova,
peguerúke lo mitâ Ñandejara’ipe guarâ.

El pesebre los amigos y el cariño hacia Jesús,
se enlazaron con la caña y el famoso arro kesu;
en la tierra el pasto verde y en la mente una ilusión,
opaichagua oî la gente ovy’a che korasô.

De regalo sandía y chipa, naranjitas y pakova,
peguerúke lo mitâ Ñandejara’ipe guarâ.


 ¡¡¡¡¡¡¡FELIZ NAVIDAD...!!!!!!

Escuche al inolvidable Marquito de Brix

Dos Trocitos de Madera - Marco de Brix (Letra y ... - YouTube

https://www.youtube.com/watch?v=wf6cvcNgdFM
30 nov. 2013 - Subido por Estanislada Dominguez
Dos Trocitos de Madera - Marco de Brix.

martes, 15 de diciembre de 2015

¡El manuscrito de Voynich...!

pagina/12, MARTES, 15 DE DICIEMBRE DE 2015
LITERATURA › PUBLICARAN LA EDICION FASCIMILAR DEL MANUSCRITO VOYNICH

Un misterio indescifrable*

El librero lituano Wilfrid Voynich (1865-1930) fue el descubridor de uno de los libros ilustrados más raros del universo, escrito en el siglo XV en un idioma desconocido y que ha dado pie a las interpretaciones más dispares y descabelladas.
Por Silvina Friera
El mundo aún no ha aprendido a leer. Quizá no aprenda jamás. Acaso dirán que suena excesivamente dramático. No faltará quien levante con urgencia la ceja –el dedo y la voz además– para señalar tamaño disparate proclamado por un puñado de chiflados o una secta de impenetrables eruditos. Exageraciones al margen, hay un misterio deslumbrante que acumula más preguntas que respuestas, más incógnitas que certezas. El manuscrito Voynich, uno de los libros ilustrados más raros del universo, escrito en el siglo XV en un idioma desconocido –hasta ahora indescifrable–, sólo se puede contemplar con la misma fascinación que se siente al mirar las estrellas. Lingüistas y criptógrafos prestigiosos han intentado despejar uno de los mayores enigmas de la humanidad. La inminencia de una revelación que no se produce alimenta hipótesis y conjeturas audaces. Algunos postulan que podría ser un tratado de botánica, otros se inclinan por un compendio astronómico. Los creyentes de las teorías conspirativas quieren ver en esas páginas un mensaje codificado, creado en un lenguaje tan evolucionado que todavía no nació su posible intérprete. Hay sugerencias que relacionan la obra con Leonardo da Vinci, los cátaros, una tribu perdida de Israel o los aztecas. En la rueda de la especulación, no podía faltar la descabellada autoría extraterrestre o el engaño perfecto de un genio de la literatura, un precursor medieval de Jorge Luis Borges. La editorial española Siloé, con sede en Burgos, fue la elegida por la Universidad de Yale (Estados Unidos), en cuya biblioteca se encuentra el original, para realizar la reproducción del “libro más famoso después de la Biblia”, como lo definió Juan José García, uno de los responsables de Siloé junto con Pablo Molinero, sello dedicado al campo de las ediciones facsimilares.
Este tesoro irresistible fue descubierto por el librero lituano Wilfrid Voynich (1865-1930) –de ahí el nombre con el que se difundió el manuscrito–, quien lo compró en 1912. Voynich, dueño de un negocio de libros raros en Londres, encontró el manuscrito en un monasterio italiano. Lo que tenía entre manos podría ser un manual medieval de alquimia o de magia. Después de revisar de punta a punta el pergamino, comprobó que estaba escrito en una lengua desconocida. Tomó fotografías de cada una de las páginas y envió las copias a especialistas. La pesquisa desencadenó distintas versiones sobre el contenido y la autoría: se trataría de un mapa de las constelaciones celestes, escrito por un sobreviviente devoto de antiguas sectas druídicas; un modesto catálogo de semillas africanas; el resultado de un experimento cabalístico, un código cifrado para transmitir mensajes, una criptografía para espías ingleses, el más perfecto fraude moderno. Los padres de la criatura serían Roger Bacon, Abraham Abulafia, John Dee, William Shakespeare, el Arcángel Uriel, el propio Voynich o un genio secreto. “El misterio es como el poder: un agujero al que se precipitan tanto los sabios como los idiotas que quieren ser útiles a la humanidad”, advierte el narrador de la novela El caso Voynich (Eterna Cadencia) de Daniel Guebel, una ficción descomunal que genera un artificio para otro artificio en la que plantea que la radical ilegibilidad de ese manuscrito “es la clave de la literatura del futuro”.
El manuscrito Voynich tiene unas 240 páginas manuscritas que, según la prueba del carbono 14 –practicada por un equipo de la Universidad de Arizona–, fueron escritas en el siglo XV. La partida de nacimiento oscila entre 1404 y 1438. Se utilizó pluma de ave para el texto y tinta de colores para las ilustraciones. No contiene tachaduras y todo el libro está escrito con unas 25 letras diferentes. El voynichés –idioma con el que se ha bautizado al texto del códice– podría ser un dialecto extinto del náhuatl, una lengua azteca. El año pasado Stephen Bax, un profesor experto en lingüística aplicada de la británica Universidad de Bedfordshire, consiguió desentrañar diez palabras, apelando a su amplio conocimiento de los manuscritos medievales y su familiaridad con las lenguas semíticas como el árabe. “El manuscrito tiene un montón de ilustraciones de estrellas y plantas. Fui capaz de identificar algunas de ellas, con sus nombres, al observar manuscritos medievales de hierbas en árabe y otros idiomas, y luego comencé la decodificación, con algunos resultados emocionantes”, confesaba Bax. Entre las palabras que ha identificado está el término para “Taurus”, junto a un dibujo de siete estrellas que parecen ser las Pléyades; la palabra “Kantairon” junto a una imagen de la planta centáurea, una conocida hierba medieval; así como otra serie de plantas: el “cilantro”, “eléboro” y “enebro”, también con sus dibujos correspondientes. “Mi objetivo es alentar a otros lingüistas a trabajar conmigo para descifrar toda la secuencia con el mismo enfoque, aunque no será fácil. De esa manera, quizá podamos entender lo que sus misteriosos autores estaban tratando de decirnos”, comentó el experto y descartó que todo sea un gran engaño. “Probablemente es un tratado sobre la naturaleza, tal vez en un lenguaje asiático o de Oriente próximo”.
Después de la muerte de Voynich, el manuscrito pasó a manos de su viuda, Ethel Boole Voynich, que lo tuvo entre 1930 y 1961; luego lo recibió Hans Peter Kraus (1961 a 1969), quien finalmente lo cedió a la biblioteca Beinecke de libros raros y manuscritos de la Universidad de Yale. En febrero del próximo año los editores de Siloé viajarán a New Haven para iniciar el trabajo de reproducción facsimilar. “Llevamos diez años detrás de este libro y hemos sido los elegidos. Es un libro maravilloso que está en boca de todos como un misterio sin resolver y además tiene una belleza caligráfica exquisita”, subrayó Juan José García, al frente también del Museo del Libro Fadrique de Basilea, espacio museístico situado en Burgos. “Cuando te enfrentas al texto es como si viajaras a tu niñez, cuando mirabas los dibujos sin entender la letra”, reflexionó García, un editor que intuye, siguiendo la estela de Stendhal, que “lo bello no es sino la promesa de la felicidad”.
*La editorial española Siloé fue la elegida para realizar la reproducción del libro “más famoso después de la Biblia”.

domingo, 6 de diciembre de 2015

¡Elvio Romero X Llopis Enrique!



Celebrando el 89° Aniversario del Nacimiento 
Del Gran Poeta Paraguayo Elvio Romero
     
Enrique Llopis   
Presenta Su Disco 
"CIELITO DEL PARAGUAY"
ELVIO ROMERO x LLOPIS  



     CON ACCESO LIBRE Y GRATUITO         
VIERNES 11 DE DICIEMBRE - 19 hs.

"Auditorio Jorge Luis Borges"

Agüero 2502 - Ciudad Autónoma de Buenos Aires
      
Presentación: Ovidio Ottaviano | Realización: ArPa Producciones

Al Término De La Presentación Se Compartirá Un Brindis 
Ofrecido Por La Embajada Del Paraguay en la Argentina
                                      

      


“El amor al Paraguay ha impuesto esta reunión, este acto que, bien sabemos todos, es un homenaje a nuestra magnífica y sufrida gente. Ciertamente, mis amigos son los amigos de mi pueblo, y no hay mayor honor para un poeta que sentir esa cálida adhesión a sus raíces, el manantial puro de donde brotó su canto”.
Elvio Romero
            
Acerca de la obra 
  
Enrique Llopis, compositor y cantante argentino ha compartido con el poeta Elvio Romero, amistad, vida y obra; y “esto es lo que sentimos al escuchar ELVIO ROMERO x LLOPIS, un admirable espectáculo multimedia producido como un sentido homenaje al gran poeta paraguayo y al pueblo del Paraguay, protagonista de los poemas de Romero… Un espectáculo de canciones, poemas e imágenes donde se hermanan las culturas del Paraguay y la Argentina, en la maravillosa profundidad de sus raíces”. 
         
Los poemas de Elvio Romero son un canto, un testimonio latente de su compromiso con la memoria y la cultura de su tierra, así como también de su historia de lucha por la libertad y los derechos humanos; la música del cantautor rosarino eleva esos poemas con climas y sonidos propios de la nación paraguaya. La voz de Elvio Romero acompaña algunas de las canciones. 
         
Con el acompañamiento de notables músicos, como el arpista Amadeo Monges, el pianista Javier Lozano, el percusionista José Luis “el Colo” Belmonte, el guitarrista Germán Arriazu y el acordeonista Néstor Acuña, el espectáculo ELVIO ROMERO x LLOPIS es un testimonio único e irreemplazable para disfrutar en plenitud de la obra de estos dos creadores.