*Paradójico resultó el encuentro en el Club Atlético Deportivo Paraguayo: las preguntas y respuestas iban y venían como una auténtica pelota tatá entre el auditorio y el embajador, eran verdaderos tiros de penal las preguntas y, con los reflejos propios de un Chilavert, respondía atajando el ex Tendotá que no dejó picando una en la cancha, todos los balones recibidos devolvió con punta carayá a las tribunas.
Todo ocurrió anoche al elegir la sede del Deportivo Paraguayo el ex presidente de la República, Dr. Nicanor Duarte Frutos, para presentarse a los referentes de la colectividad paraguaya organizada como nuevo embajador en la Argentina, acompañado del flamante ministro de embajada don Antonio Aranda Cuevas, reconocido dirigente de la colectividad recientemente nombrado en la función diplomática, junto a otros funcionarios que conforman el equipo del Jefe de la Embajada del Paraguay en Buenos Aires.
Presentado por el presidente de dicha institución anfitriona, Sr. Salomón Ramírez Santacruz, Duarte Frutos saludó a los representantes de los partidos políticos, dirigentes institucionales, sociales, culturales y a los presentes en general, delineó brevemente las funciones que corresponden a un embajador y los objetivos principales de su gestión al decir: “vengo a gestionar ante el gobierno argentino todas las cuestiones que hacen a la relación bilateral con el Paraguay y a servir a los compatriotas en la medida que ofrece sus posibilidades una embajada, ya que no es una institución ejecutiva pero golpearemos todas las puertas necesarias para solucionar los problemas.”
Acabado lo protocolar, las palabras de bienvenidas de los residentes y los mensajes de los recién llegados, comenzó una suerte de interpelación popular a Nicanor Duarte Frutos sobre su condición de ex presidente, el papel jugado históricamente por el Partido Colorado, por la destitución del presidente Lugo y por ser actual embajador del gobierno de Cartes que en un abrir y cerrar de ojos militarizó partes del territorio nacional, autorizado por el Congreso, obtuvo también la aprobación de las polémicas leyes de la Responsabilidad Fiscal y de la Alianza Público-Privada, acusada de super poder una y de privatista la otra, puntos sobre los cuales se explayó ampliamente y desinfló en gran medida la cargada atmósfera que reinaba en la sede del Deportivo Paraguayo.
Por su condición de ex presidente respondió: “Como ex presidente debo decir, en 200 años de vida política del Paraguay fui el primer presidente constitucional, elegido por el voto popular, que entregó el mando a otro presidente constitucional como fue Fernando Lugo en 2008; como también, el primer presidente colorado que no fue procesado ni imputado en caso alguno por cumplimiento de sus funciones y soy el tercer ex presidente paraguayo designado embajador junto a Eligio Ayala y Natalicio González.”
Sobre el crítico papel histórico del Partido Colorado dijo:“Yo no vengo a defender las barbaridades y complicidades aportadas por algunos colorados a la tiranía de Stroessner, ni mucho menos hacerme cargo de todos los crímenes cometidos bajo el dilema o disyuntiva dialéctica amigos-enemigos que causó la gran diáspora paraguaya, exilio que no comenzó en 1954 con el golpe de Stroessner, ya venía desde mucho antes…Pero también muchos colorados fueron victimas de la dictadura, que cayeron bajo la fatal dialéctica de amigos-enemigos, compartiendo muchos la muerte y el exilio con los demás compatriotas.
En cuanto a la destitución de Lugo aseveró: “Lugo fue destituido porque no fue capaz, durante su mandato, de crear una base popular que lo sostenga, no pudo llevar más de 500 personas a la plaza para defenderlo, porque si hubiera juntado 10 mil en la plaza habría que ver si era destituido. Y no tengo nada en contra de Lugo, incluso estoy de acuerdo que sea elegido como Secretario General de la UNASUR, pero para eso hay que lograr un consenso político interno en el Paraguay y luego buscar el apoyo de los demás países que estarían varios de ellos de acuerdo.
Se sabe que Duarte Frutos un día antes se había reunido con sus correligionarios colorados, en la sede de la calle Maipú 464 de la Federación Paraguaya de Entidades(FEPARA), que podemos denominar una reunión monocromática y por extensión y maledicencia “granítica” que, para acompañarlo en su gestión, deberá adecuarse al embajador que aclaró que venía “como paraguayo y no como colorado” en la función diplomática, mientras en el Club de la calle Piedras 1676 la reunión era realmente una policromía política y social que desplegó su caleidoscopio en cada pregunta, consulta, elogio y reproche que recibía el ex presidente y respondía con respeto magistral pero abundando en demasía con los datos y recursos de buen orador, un tanto abrumador para los oyentes no acostumbrados a manejar estadísticas y porcentajes macroeconómicos que “invisibiliza” la problemática concreta de los paraguayos que transpiran la gota gorda para mantener a la familia de acá, de allá y de todas partes: llámese costos (40%) de transferencia de remesas; llámese escandalosa suba (100%) de precios en los pasajes al Paraguay cada fin de año; llámese mejores tratos, eficiencia y transparencia en los servicios de los consulados; llámese inaceptables e interminables maltrato y cobro de coimas en las fronteras, principalmente, en Puerto Falcón y Encarnación, entre otras pesadillas.
Para la esperanza de los paraguayos que asistieron, el embajador Duarte Frutos se comprometió a acompañar todas las iniciativas y reclamos de los residentes ante los gobiernos de Paraguay y Argentina, por citar algunas emblemáticas cuestiones, como los reclamos paraguayos por Yacyretá, la exigencia al Tribunal de la Justicia Electoral para el empadronamiento automático o al menos, para continuar la inscripción manual para los 600 mil paraguayos en condiciones de votar en la Argentina, entre otras quemantes inquietudes, incluso respondió sobre el carácter de la democracia restringida que regía en Paraguay, según puntualizó uno de los presentes: “La democracia esta cuestionada en todas partes, porque no satisface las necesidades del pueblo, pero es el mejor sistema político conocido, pero fallan sus representantes, le falta tal vez más participación popular y control del pueblo de sus representantes. Sin embargo, sumada a las ineficiencias de las democracias actuales, incluso se puede ver esas graves crisis y cuestionamientos en países como Grecia, Italia, España, según analizó el periodista e investigador Ignacio Ramonet, en su Tiranía de la Comunicación, los tres poderes hoy en día son: el poder económico, el poder mediático y el poder político. En varios países los dos primeros poderes ostentan grupos económicos-financieros y el tercer poder, entonces, el político, puede llegar a ser una formalidad, ellos deciden en el imaginario popular quien es o no presentable políticamente, importándole muy poco que un presidente haya sido electo por el pueblo para lapidarlo mediáticamente.
En medio del acalorado intercambio de balones en llamas(pelota tatá pyvoí), una señora de apellido Asilvera, luchadora por los derechos humanos que sufrió torturas y cárceles durante el régimen de Stroessner, agradeció al ex presidente por haber concretado en su gobierno la indemnización a las victimas de la dictadura, por no renovarle a EE. UU. el convenio por el cual podía estacionar marines norteamericanos en el Chaco paraguayo y por haber hecho votar al Paraguay en la ONU a favor de Cuba en temas de derechos humanos. Sobre dichos reconocimientos públicos que recibió con agrado Duarte Frutos, otro señor Salinas, conocido dirigente de la colectividad que brega por la reivindicación del doctor Rodriguez de Francia como Padre de la Patria, agradeció asimismo al ex presidente por haber invitado a su asunción al comandante Fidel Castro al Paraguay, "para exorcizar el fantasma del comunismo en nuestro país", dijo, por haber votado en contra del ALCA en Mar del Plata junto a los demás presidentes sudamericanos y finalmente, advirtió el peligro de privatización que entrañaba la ley de Alianza Público Privada(APP) recién promulgada en el Paraguay.
Para cerrar, también en claves futbolísticas, podemos afirmar que la culminación del encuentro en el Deportivo Paraguayo fue ejemplarmente democrático, agradeciéndose mutuamente los dueños de las preguntas y las respuestas, pero el partido soó recién empieza. La cancha quedó marcada, después de patear todos los jugadores de derecha, del centro y de la izquierda, y Nicanor mostrarse en el arco como el mejor de la “Selección Nacional” de Cartes, la pelota volvió a su punto de partida, instalada sobre el punto de penal, en señal de que ella no tiene dueño y ha soñado siempre con los habilidosos como los convocados en el Club en honor del nuevo embajador del Paraguay en la Argentina.
Lo mitãma he’i
Buenos Aires, 13 de noviembre de 2013
El penal
Soneto a un glorioso empate
El sol cuelga al poniente más grande su
medalla
de luz, como trofeo. ¿Por qué paró la ball?
Se oye la voz “fue mano” del referee,
que falla;
cuenta los once pasos: se cobrará penal.
La gritona borrasca del populacho calla.
Dos atletas se enfrentan en lucha
personal:
de un lado, bajo el arco, el ágil
guardavalla,
del otro, un artillero del shot sensacional.
Suena el pito. Se estudian los dos por
un instante,
y echándose el maestro del gol hacia
adelante,
el shot de la victoria martilla de una vez.
Brama un ciclón de aplausos la multitud
en masa...
junto al ángulo, arriba la pelota
atenaza
el famoso goalkeeper en
un salto de pez.
Manuel Ortiz Guerrero
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