viernes, 21 de diciembre de 2012

En Navidad y Año Nuevo: ¡El paraíso que te espera...!


El paraíso que te espera


  Cuando Dios echó a Adán y Eva del Paraíso por desobedecer a su mandamiento y ser débiles ante las tentaciones,  no habló nunca de que el Edén se había destruido para siempre sino que quedó prohibido para aquella pareja imprudente que fue desalojada por romper la alianza del hombre con el Creador.  

 

Pero al restablecerse la Nueva Alianza, con la venida del Mesías  que con su sacrificio selló la unión, cada hombre y cada mujer está rehabilitado para volver al Paraíso perdido que espera en algún lugar o tiempo, pero con la condición de que el camino que llevará de vuelta al Edén, necesariamente, deberá ser trazado por  cada uno, a su personal e irrepetible manera. 


                                               Gilberto Ramírez Santacruz

lunes, 17 de diciembre de 2012

¡Adiós a Chester Swann: Un día Celso Brizuela como Alonso Quijano...!


Adiós a Chester Swann:                                           

                                            Un día Celso Brizuela como Alonso Quijano

 

En un lugar leyendario de las tierras paraguayas

de cuyo nombre perdido de Luque recordaré

siempre,

vivía un valiente tallador y enderezador de entuertos

rodeado de gigantes malechores sin aspas,

de bufones y  pigmeos cortesanos de la adulonería,

que para emprender día a día su batallar Celso Brizuela,

como auténtico caballero de rey y de ley 

a los pyragués de la dictadura de Tembelo,

se rebautizó como el rockero Chester Swann

igual que Alonso Quijano que se hizo Quijote,

y montados ambos en sus corceles Rocinantes,

el manchego cabalgando en su esquelético potro,

el luqueño arrasando con su corcoveante moto Ninja

y  al hombro una de sus infaltables guitarras Fender

y ejecutando al mismo tiempo con armonía

la más sublime canción con su gualambau mby’a,

pero ya de regreso como héroe de un largo periplo

o como yendo glorioso y feliz a la aventura  final.

                                                                     
Gilberto Ramírez Santacruz                                                                                                          
Buenos Aires, 17 de diciembre de 2012.-